La sorpresiva declinación de Serena Williams en el Whirlpool Abierto Monterrey 2012 provocó ayer sentimientos de frustración y tristeza en la mayoría de los aficionados al tenis.

"Qué triste para los organizadores, pero ellos no tienen la culpa porque lo presumieron todo el tiempo", dijo la jugadora mexicana Ivette López, quien ayer fue eliminada del Torneo de Calificación.

Serena desestabilizó a los aficionados que ya habían comprado su boleto para verla jugar en la cuarta edición del Abierto regio, al presentar molestias en el tobillo izquierdo, las cuales evidenció en el Torneo de Brisbane.

"Me siento muy decepcionada, la verdad es que compramos boletos para verla jugar, en general es una sensación muy triste", dijo Irma Garza, de San Pedro.

La noticia, dada a conocer a través de un comunicado del comité organizador horas antes del arribo de Serena, conmocionó a los aficionados que seguían las acciones de los encuentros de calificación. Otros más fueron a reclamar a las afueras del Sierra Madre, reconoció un elemento de seguridad.

"Toda la gente que conozco y que le gusta el tenis estaba muy contenta por ver jugar a Serena; ahora resulta que siempre no", agregó Garza.

Algunos aficionados trataron de digerir esta noticia al argumentar que vienen más jugadoras de calidad, pero no con la trayectoria que respalda a Serena, quien suma 13 Grand Slams y 39 títulos en el circuito femenil.

"Es muy triste para el torneo porque es un atractivo, soy una fanática del tenis y deseaba verla, es una pena que no venga", agregó María Elena Orozco.

Los 2 mil 500 boletos vendidos para los partidos en la Cancha Principal y el garantizado para el martes, día en el que iba ser programada Serena, no serán reembolsables.