  | | Los albiazules hicieron del Estadio Jassim Bin Hamad una sucursal del "Gigante de Acero".
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Reuters |
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| | Afición rayada
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| | Mohamed en Estadio Jassim Bin Hamad
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| | Xavi entrenador del Al Sadd
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| | La afición rayada es la única que se escucha en el partido.
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| | Afición rayada presente en Estadio Jassim Bin Hamad
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Reuters |
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| | Afición rayada presente en el encuentro contra Al Sadd
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Reuters |
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| | Aficionados rayados en el estadio Jassim Bin Hamad
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| | Afición rayada presente
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AP |
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| | Afición rayada presente en el Estadio Jassim Bin Hamad
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| | Los Rayados contra Al Sadd
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| | Al Sadd contra rayados en el Estadio Jassim Bin Hamad
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| | Observa el color de la afición rayada en Qatar, en el triunfo de Rayados 3-2 sobre Al Sadd.
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EFE |
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| | Observa el color de la afición rayada en Qatar, en el triunfo de Rayados 3-2 sobre Al Sadd.
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| | Observa el color de la afición rayada en Qatar, en el triunfo de Rayados 3-2 sobre Al Sadd.
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EFE |
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En la cancha, el Monterrey llevaba las rayas azul y blanco como lo hace jugando de local y en la tribuna, su gente se impuso como si fueran los dueños de casa.
El Estadio Jassim Bin Hamad se convirtió en una pequeña sucursal del BBVA y aunque técnicamente el Al Sadd era anfitrión, los Rayados jugaron como en casa.
La "tablah" de los aficionados del campeón de Qatar se vio opacada por la tambora y los platillos de los seguidores albiazules que ocuparon una de las cabeceras del inmueble.
No es que necesitaran ayuda para hacerse escuchar, pero hasta contaron con el apoyo de hinchas del Espérance de Túnez que, pese a la eliminación de su equipo en el primer juego ante Al Hilal, permanecieron en el estadio y se unieron a la porra regia.
"¡Monterrey, Monterrey!", sonaba como un estruendo, que los aplausos organizados de los anfitriones vestidos en túnicas.
Si no fuera por el ruido que provocan los regios, pareciera que el partido se jugaba a puerta cerrada, por el estilo callado que tienen los qataríes de apreciar el futbol.
Están en Qatar, pero Rayados jugó de local y para la fiesta tampoco extrañaron el terruño.
Con la victoria como pretexto, cientos de aficionados se dieron cita en un hotel para seguir la celebración hasta los primeros minutos de hoy. |
