El futbolista del Chapecoense y uno de los sobrevivientes del accidente de avión ocurrido en Colombia a finales de noviembre, Alan Ruschel, anunció hoy que tiene intenciones de volver a las canchas como jugador.

Ruschel participó este sábado en una conferencia de prensa en Chapecó, estado brasileño de Santa Catarina, en la que, en medio de lágrimas, habló del milagro de estar vivo y de sus deseos de volver a jugar.

"No existen palabras para contar, es una mezcla grande de sentimientos, una alegría por estar aquí de nuevo pero al mismo tiempo un luto por haber perdido tantos amigos", dijo visiblemente emocionado el lateral izquierdo al inicio de la rueda de prensa.

Ruschel es uno de los seis sobrevivientes del accidente que causó la muerte de 71 personas y el primero en ser rescatado.

"En el momento en que cayó el avión, Dios me puso en su regazo y me dijo que tenía más misiones en la Tierra, por eso él no me llevó. La única explicación es la de los milagros, el de estar vivo y el de estar andando, pues los médicos dijeron que la lesión en mi columna fue muy grave".

El jugador narró que cambió el asiento que se le asignó en la parte trasera del avión para sentarse más adelante con el portero suplente Jackson Follmann, otro de los sobrevivientes.

"Cuando llegamos a Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), antes de subir al avión, Cadu (uno de los directores del Chapecoense que falleció) pidió que me sentara más adelante para dejar que los periodistas se sentaran juntos atrás", explicó.

"Yo no quería, pero entonces vi a (Jackson) Follman y él insistió en que me sentara a su lado".

En el accidente de la aerolínea LaMia murieron 21 de los 22 periodistas que viajaban con el Chapecoense para cubrir el partido de Ida por la Final de la Copa Sudamericana ante el colombiano Atlético Nacional, junto a otros dirigentes, la comisión técnica y 19 jugadores del club brasileño que buscaba su primer título internacional.

El cambio de asiento es el último recuerdo de Ruschel con relación al accidente.

"Después, estaba mi esposa Marina hablándome en el hospital. Yo no sabía lo que estaba pasando y poco a poco me decían. No recuerdo nada. Es una cosa muy loca, no puedo explicar lo que pasó", agregó.

A lo largo de la conferencia de prensa Ruschel alternó momentos de llanto y de optimismo con relación a su futuro.

"Haré de todo para volver a jugar al futbol", reiteró.

"Será con mucha paciencia. Calculé tres meses para calcificar la columna y ya pasó casi uno. Tres meses más para fortalecer la musculatura. Esto es sólo en el comienzo".