Veinte años después de imponer una moda extravagante en el futbol mexicano con los Toros Neza, ahora Antonio Mohamed y Miguel Herrera se unieron para engalanar el Estadio BBVA Bancomer.

Con la elegancia en su vestir como su etiqueta de presentación, los técnicos de los Rayados y Xolos vivieron su propio partido desde los banquillos.

El "Piojo", ex técnico del Monterrey visitaba por primera vez el "Gigante de Acero" y lo hacía con sus bravos Xolos de Tijuana, líderes del campeonato.

Por su parte, el "Turco" estaba aún sacudido por el anuncio del cese del presidente Luis Miguel Salvador en la semana, pero con la encomienda de levantar al equipo para aspirar a un digna despedida del directivo albiazul en diciembre próximo.

Su primer encuentro fue para darse un afectuoso abrazo, acompañado de sonrisas, quizá recordando entre ellos aquella picardía que los caracterizó cuando jugaban en el alegre Toros Neza.

Ambos de traje, Herrera de oscuro y Mohamed de azul. A la distancia, el DT rayado se distingue por no usar calcetines y a pesar de los 30 grados centígrados sobre el terreno de juego ninguno se quitó el saco para dirigir a sus pupilos.

Los primeros corajes los hizo el "Piojo", quien le dijo de todo al cuarto árbitro y juez central cuando no le marcaron un claro penal a sus Xolos.

Y mientras en la cancha, los Rayados y Xolos no lograron hacerse daño, a la orilla del campo Mohamed y Herrera terminaron en un abrazo de buenos deseos para el resto del torneo.