El chileno de pocas palabras, ese que no le gustaba dar entrevistas cuando era la imagen y artífice de la época dorada de Rayados, quedó atrás.

No metió gol en su juego de homenaje ante el Herediano de Costa Rica por lo que esa postal festejando tapándose las orejas con los dedos no se pudo ver, pero sí al Suazo de sentimientos, que hasta las lágrimas derramó en el Estadio BBVA Bancomer.

"Uno en esos momentos no controla las emociones" declaró Suazo una hora después de finalizado el juego en una conferencia de prensa.

"Al ver correr primero a mi hijo Jesús, que pocas veces pudo disfrutar por estar muy pequeño, y después toda mi familia que siempre estuvo ahí, siempre me ha apoyado en las buenas y en las malas, después me ganó la emoción".

Humberto Suazo pisó por primera vez tierras regias un 15 de julio del 2007 y el 10 de julio del 2016 se confirmó como el jugador más importante en la historia del Club Monterrey. Ascendió al nivel de leyenda.

"Estaba muy nervioso, el nivel de juego del equipo era muy rápido, yo no entreno, solamente juego, estaba preocupado a ver si podía jugar un poco, si me podía lesionar, pero intenté dar lo mejor que pude el apoyo del equipo fue fundamental", reconoció el ariete.

Pero no importó que no anotara, pues sus 121 goles como rayado le dieron cinco títulos al club y su sola presencia tenía ayer felices a 42 mil 331 aficionados que se rindieron a sus pies.

Suazo habló menos de 10 minutos, pero bastó para aclarar que su retiro es definitivo y no jugará más con Rayados como se rumoró que lo haría en un duelo oficial.

También fue tiempo suficiente para decir que le agradaría ver a uno de sus hijos jugar con el Monterrey y hasta reveló su gol favorito.

Sí, aquel que le metió al Santos en la Final del Apertura 2010 para sellar el 3-0 que les dio el título.

Hasta dedicó palabras a la prensa para a manera de disculpa aclarar que los episodios de choque que tuvo fueron por su carácter.

"El cariño de la gente se va a quedar para siempre, queda marcado para la vida", expresó el famoso Chupete.