Sólo el triunfo le sirve al Monterrey si desea evitar quedar fuera por "knockout" de la Liguilla del Apertura 2015.

Los Rayados reciben esta noche al América en el Estadio BBVA Bancomer con la obligación de ganar para mantener vivas sus esperanzas de clasificar y llegar a la última jornada del torneo con vida.

Con sólo 20 puntos después de 15 jornadas, el equipo dirigido por Antonio Mohamed se juega todas sus cartas hoy contra las Águilas que están virtualmente adentro de los Cuartos de Final, con 27 unidades.

El equipo albiazul perdió su posición en zona de clasificación la jornada pasada después de perder contra el Querétaro y para recuperar el terreno perdido necesita ganar hoy y en la última fecha contra el Toluca para seguir vivo.

Aunque todavía necesitará una combinación de resultados para ganar su boleto a la Liguilla, el primer paso debe darlo hoy contra el equipo de Coapa que dirige Ignacio Ambriz y que llega como el mejor equipo jugando como visitante en el torneo.

El América viene de vencer 3-2 en el Estadio Nemesio Díez a los Diablos Rojos en lo que fue su sexto triunfo en ocho partidos que ha jugado fuera de casa, condición en la que además ha sido un equipo contundente con 17 goles anotados, es decir, tiene un promedio de más de dos tantos por juego.

El invicto de los Rayados en el Estadio BBVA Bancomer está en serio riesgo no sólo por la calidad del rival, sino por la propia inestabilidad que ha mostrado el conjunto albiazul.

Aunado a los pobres resultados, el Monterrey está por terminar una semana que estuvo marcada por el altercado que vivieron Dorlan Pabon y Neri Cardozo, quien resultó con una herida en la boca por un puñetazo que le dio el colombiano.

En el campamento rayado esperan que el equipo reaccione positivamente después del incidente y desde ayer cerraron filas al evitar el máximo contacto posible con la prensa y sus propios aficionados, tratando de encontrar la calma después de la tempestad.

La forma de de superar lo vivido durante la semana es ganando la única pelea que puede mantenerlos vivos de cara a la Liguilla.