La historia de Jonathan dos Santos y sus llamados al Tricolor está inmersa en la polémica y tienen un común denominador: termina por no formar parte del equipo en un torneo oficial.

Con el lío de faldas en el hotel de concentración del Tri en Ecuador, previo a la Copa América de Argentina, el volante del Barcelona B ha quedado desligado de un representativo nacional por cuarta ocasión en los últimos 4 años, y en otra él solicitó no venir.

En el proceso previo a al Mundial Sub 17, de 2007, Dos Santos no fue integrado en la lista oficial.

En 2009, el jugador no fue cedido por su club al proceso del Tricolor Sub 20 que se enfilaba al Mundial de esa categoría.

Pero la ausencia más dolorosa para Jonathan fue la de 2010, cuando no pudo librar el último corte previo al Mundial de Sudáfrica, lo que provocó incluso que su hermano Giovani amagara con dejar el equipo, y además fuertes declaraciones del padre de ambos, Francisco dos Santos, quien dijo que "Jona" ya no jugaría por México.

En esta ocasión, Giovani aceptó ir a Argentina a jugar la Copa América, independientemente de la separación de su hermano Jonathan.

"Hablamos con él (Gio)... obviamente (está) dolido, pero hasta ahorita no hay ninguna objeción para que viaje él a la Copa América", sostuvo ayer Héctor González Iñárritu, director de Selecciones Nacionales.

Con la suspensión de 6 meses la que se hizo acreedor, Jonathan quedará fuera de otro equipo nacional ahora en la justa continental.

En agosto del 2010, pidió un aval a la FMF para no integrar el equipo mexicano que se mediría a la Selección española en el Estadio Azteca, pues jugaría la Supercopa de España con el Barcelona ante el Sevilla.

Con los intentos frustrados de integrarse a un Tricolor, el sueño de la familia Dos santos, de ver juntos a Jonathan y Giovani en un mismo combinado, se ve trunco una vez más.