El regresar de Querétaro, donde fue titular indiscutible, no representa un paso atrás para Jorge Díaz de León, que a pesar de pintar como suplente de Enrique Palos en el arco de Tigres, no se amilana.

"Estoy para ponérsela difícil a Palos, como él me lo pondrá a mí; hemos trabajado fuerte y todos empezamos de cero para que al final sea el técnico quien tome la decisión sobre quién debe jugar", explicó.

El canterano, quien vuelve al equipo que lo forjó, se dijo feliz de regresar a la institución auriazul, en donde espera triunfar y demostrar su valía.

"Estoy muy contento, me encontré con un gran grupo, con grandes personas, gente de mucha calidad humana, por lo que me queda claro que se hará un gran equipo en el próximo torneo.