• Megan Rapinoe lamentó las palabras que usó para decir que no asistiría a la Casa Blanca en caso de que EU logre el título en Francia. FOTO: Reuters

Megan Rapinoe, jugadora de la Selección de Estados Unidos, se disculpó este jueves por su uso de improperios al decir que no visitaría la Casa Blanca si el equipo gana la Copa del Mundo, pero reiteró su posición.

"Respaldo los comentarios que hice sobre no querer asistir a la Casa Blanca, aunque lamento el lenguaje peyorativo que usé. Mi madre estaría muy molesta por eso", dijo Rapione.

Sus comentarios en una conferencia de prensa previamente planeada se producen un día después de que el Presidente Donald Trump criticó a la estrella estadounidense en Twitter. Trump se refirió a un video que ha circulado en Twitter en días recientes, diciendo: "Megan no debería nunca faltarle el respeto a nuestro país, la Casa Blanca o nuestra Bandera, especialmente con lo mucho que se ha hecho por ella y su equipo".

Trump dijo que invitaría al equipo estadounidense gane o pierda.

Esta semana, Trump le dijo a The Hill que no era apropiado que Rapinoe protestara durante el himno nacional.

Los comentarios iniciales de Rapinoe fueron hechos durante una entrevista con una revista en enero, en la que se le preguntó si estaba entusiasmada con la posibilidad de ir a la Casa Blanca. En un fragmento en video de la entrevista colocado el martes en medios sociales, se ve a Rapinoe usando un improperio cuando dice que no va a ir.

"No iré a la pinche Casa Blanca", dijo Rapinoe, quien duda de que el equipo sea invitado.

La estratega del conjunto estadounidense, Jill Ellis, dijo que no pensaba que la controversia por los comentarios fuera una distracción para el equipo, que se prepara para el partido de Cuartos de Finales contra Francia a disputarse este viernes.

"Pienso que este equipo tiene una concentración formidable", dijo Ellis. "Todos respaldamos a Megan".

Rapinoe comenzó a arrodillarse durante el himno nacional en el 2016 para mostrar solidaridad con el ex quarterback de los 49's de San Francisco, Colin Kaepernick, quien lo hacía antes de partidos de la NFL para protestar contra la injusticia social y racial. Pero la federación estadounidense de futbol adoptó una política que requiere que los jugadores se mantengan de pie.