Joan Manuel Serrat, a sus 76 años, y Joaquín Sabina, a los 70, transmiten un incuestionable respeto y admiración por el otro sobre el escenario, en esta su tercera gira juntos en los últimos 12 años. Sí, existe un enorme cariño, pero sobre todo desprenden agradecimiento de manera constante... y eso, a su vez, lo agradece y reconoce su numeroso público.

Es bien sabido que dar es una de las sensaciones más placenteras y agradecer es una excelente manera de dar. A finales de cada noviembre en los Estados Unidos, y desde la independencia en 1776, de manera oficial, se celebra el Día de Acción de Gracias, que tiene sus orígenes hace 400 años (por las buenas cosechas) y sin otro motivo que agradecer por lo que cada uno quiera.

En estos días un caso dentro del futbol mexicano me llama la atención por su aparente falta de agradecimiento: José Juan Macías era un futbolista casi desconocido hace un año, cuando Chivas decide prestarlo a León, con una opción de compra sumamente elevada. El juvenil atacante tuvo un 2019 de ensueño, primero con la camiseta del León y después con la de la Selección Nacional. Los 15 MDD por la opción de compra, parecieron poco en tan solo 12 meses y Grupo Pachuca estaba dispuesto a pagar por el jugador. Sólo que, para sorpresa de muchos, la operación no se realizó, debido a que el futbolista no dio su anuencia para contratarse con León, de tal manera que Macías regresa a Chivas, con quien tiene contrato vigente.

Hoy la afición esmeralda se encuentra dolida por la conexión (al parecer sin reciprocidad) que había con el jugador, quien a simple vista parece que utilizó al equipo de Nacho Ambriz para cotizarse y después partir. En realidad sus deseos de emigrar al extranjero pueden más que las formas y seguramente con el tiempo se dará cuenta la importancia que tiene ser agradecido para una afición y para el público que no olvidan. No en vano se dice que la gratitud es la memoria del corazón.

Alan Pulido se ajusta a la perfección en este tema y, tras la confirmación de su salida de Chivas hacia la MLS, la afición de Guadalajara, que recibe por un lado a Macías, tiene la posibilidad también de experimentar el desaire que su flamante campeón goleador les hace, justo cuando comenzaba a ser querido.

Hay ocasiones en que la palabra "gracias" no es suficiente por sí sola, nos sentimos tan afortunados que necesitamos agregar: "muchas","mil", "infinitas", "todas" y hasta "inmensas" gracias. Es ahí cuando cada vez más gente utiliza este recurso en público: "no existen palabras para describirlo".

Sí, a los agradecimientos les hacen falta sinónimos, por lo que pasan a jugar un papel importante los gestos, la sencillez, la humildad y el lenguaje corporal mientras se mencionan, algo que Sabina y Serrat han aprendido a la perfección, por cierto. Porque agradecer habla bien del corazón y de paso permite que el corazón hable.

 
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